Como cada Otoño, he empezado un nuevo curso sobre metodología docente, y en este caso me ha tocado el modelo Flipped Classroom, una interesante idea que tiene como premisa el aprovechamiento máximo del tiempo de clase en el aula para tareas prácticas y cooperativas que ayuden a los alumnos a alcanzar los objetivos y a asimilar los contenidos de forma significativa.
Así, el modelo busca aprovechar las TIC para que el docente pueda grabar sus clases y compartirlas con los alumnos para que éstos las vean en sus casas, de forma que el tiempo de clase sea un tiempo efectivo de trabajo, ya sea de forma cooperativa o no, en el que los alumnos practiquen lo aprendido en las sesiones grabadas bajo la tutela del profesor.
Aunque en un principio la idea me parece genial, no puedo evitar verlo desde un punto de vista algo pesimista, ya que el abrazar este modelo implica confiar absolutamente en que TODOS Y CADA UNO DE LOS ALUMNOS van a realizar el visionado de los vídeos y explicaciones en casa, y además implica unas cargas de trabajo enormes para el profesor, o eso creo. Creo que puede ser una idea muy válida para temas o aspectos concretos, pero no para programar una asignatura completa en el ámbito de la ESO.
Espero que el curso me anime a intentar cosas nuevas que mejoren las experiencias y el aprendizaje de mis alumnos, pero trabajando en un centro como el mío, en el que el perfil socioeconómico del alumnado es bastante bajo, me parece cuanto menos complicado.
En cuanto a mi aprendizaje, hoy he conocido dos nuevas herramientas TIC:
- Soundhound: Para grabar y compartir audios y vídeos caseros con los alumnos
- Padlet: Una especie de tablón de anuncios interactivo en el que sólo con acceder a un enlace cualquier persona puede aportar sus ideas acerca de un tema.
